Fantasmas en la Escuela
[Concepción, Chile] Nada del otro mundo. La Crónica publica la siguiente nota:
Fantasmas Mateos en Escuela Chorera. Extraños fenómenos en sus aulas. Funcionarios jamás atribuyeron los bizarros sucesos a una explicación paranormal. Hasta que los guardias dieron los indicios de que "algo hay".
Algunos funcionarios del colegio dicen sentir, algunas veces, pesado el aire y un frío que les cala hasta los huesos.
En todo colegio el ruido de sillas y mesas es permanente cuando los alumnos están en su horario de clases. Sin embargo, lo anormal es que continúen sintiéndose en la noche. Hugo Leiva fue nochero de la escuela Perla del Bío Bío, y le tocó vivir sin temor una presencia fantasmagórica. "Mi fe en Dios es fuerte y sé que cualquier espíritu de tormento huirá ante su palabra", comentó Leiva, quien hace tres meses dejó de trabajar en el colegio.
José Aguilera se desempeña como auxiliar en la escuela desde hace algunos años y cuenta que le tocó vivir un hecho muy raro. "Estaba con una colega, cuando ella me dice que sintió que la habían tomado por la cintura". La mujer pensó que Aguilera la había tocado, pero luego se percató de que estaba junto a ella y no podría haber sido.
No obstante, la historia más espeluznante le sucedió a Hugo Leiva, quien debió lidiar varias veces con el fantasma del colegio. "Cuando recorría el segundo piso de la escuela, me paseaba sala por sala y escuchaba como si un profesor estuviera escribiendo con tiza en la pizarra", narró.
Nervios de Acero
Juan Molina comentó un hecho que le ocurrió a Leiva en la escuela: "Recuerdo que llegué al colegio y encontré a Hugo arrodillado en el piso orando con la Biblia abierta". "Me acuerdo bien", agregó Leiva, contando que "el 'Rucio' (su perro) estaba ladrando y mostrándole los dientes a alguien". Sin embargo, cuando se acercó al lugar, se dio cuenta de que estaba vacío. "El perro seguía ladrando y se hacía para atrás, como si tuviera miedo", añadió. La intensa fe de Leiva y su creencia evangélica lo llevaron a arrodillarse y orar. "Le pedí a Dios que alejara todo espíritu inmundo de mí, y ahí el 'Rucio' se calmó", señaló.
[26 de marzo de 2008]
[©crónica]
Fantasmas Mateos en Escuela Chorera. Extraños fenómenos en sus aulas. Funcionarios jamás atribuyeron los bizarros sucesos a una explicación paranormal. Hasta que los guardias dieron los indicios de que "algo hay".
Algunos funcionarios del colegio dicen sentir, algunas veces, pesado el aire y un frío que les cala hasta los huesos.
En todo colegio el ruido de sillas y mesas es permanente cuando los alumnos están en su horario de clases. Sin embargo, lo anormal es que continúen sintiéndose en la noche. Hugo Leiva fue nochero de la escuela Perla del Bío Bío, y le tocó vivir sin temor una presencia fantasmagórica. "Mi fe en Dios es fuerte y sé que cualquier espíritu de tormento huirá ante su palabra", comentó Leiva, quien hace tres meses dejó de trabajar en el colegio.
José Aguilera se desempeña como auxiliar en la escuela desde hace algunos años y cuenta que le tocó vivir un hecho muy raro. "Estaba con una colega, cuando ella me dice que sintió que la habían tomado por la cintura". La mujer pensó que Aguilera la había tocado, pero luego se percató de que estaba junto a ella y no podría haber sido.
No obstante, la historia más espeluznante le sucedió a Hugo Leiva, quien debió lidiar varias veces con el fantasma del colegio. "Cuando recorría el segundo piso de la escuela, me paseaba sala por sala y escuchaba como si un profesor estuviera escribiendo con tiza en la pizarra", narró.
Nervios de Acero
Juan Molina comentó un hecho que le ocurrió a Leiva en la escuela: "Recuerdo que llegué al colegio y encontré a Hugo arrodillado en el piso orando con la Biblia abierta". "Me acuerdo bien", agregó Leiva, contando que "el 'Rucio' (su perro) estaba ladrando y mostrándole los dientes a alguien". Sin embargo, cuando se acercó al lugar, se dio cuenta de que estaba vacío. "El perro seguía ladrando y se hacía para atrás, como si tuviera miedo", añadió. La intensa fe de Leiva y su creencia evangélica lo llevaron a arrodillarse y orar. "Le pedí a Dios que alejara todo espíritu inmundo de mí, y ahí el 'Rucio' se calmó", señaló.
[26 de marzo de 2008]
[©crónica]
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