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Extraño Animal en Quellón

Extraño Animal en Quellón

[Chiloé, Quellón] [Todavía no saben de qué animal podría tratarse]. Viene de La Estrella de Chiloé:

En Marzo de 2008, Cristián Carrillo, al Detener Sus Labores de Pesca en Caleta Zorra -al Sur de Inío- Encontró en la Costa el Cadáver de un Raro Animal de unos 50 centímetros de largo y 30 de altura.
El joven pescador se sorprendió por la ferocidad de las facciones del ser, por sus enormes dientes y por dos restos de piel y hueso que asemejaban una quinta y sexta patas, algo imposible en los vertebrados, salvo malformaciones.
Alentado por la curiosidad decidió llevarlo hasta la localidad de Oqueldán, donde se lo dio a conocer a sus familiares más cercanos.
Como nadie salía del asombro ni podía identificar qué bestia era -incluso rumoreándose que se trataba del chupacabras-, el propio Carrillo hizo público el hallazgo para disipar la incertidumbre.
"Primero creí que era un zorro o algo similar, pero después vimos que tenía estas otras patas. De verdad que no tengo ni idea de que animal se trata", concluyó.
No obstante, al ser revisado por el veterinario Enrique Vallejos, el profesional descartó esa hipótesis.
"Los caninos que presenta este animal en las fotografías indicarían que se trata de un perro".
[19 de enero de 2009]
estrella de chiloé]


Encuentran Monstruo Marino

Encuentran Monstruo Marino

[Antofagasta, Chile] [¿Qué hace este monstruo marino en este blog? Es sólo por razones epistemológicas que nos parece un monstruo. La mancha blanca de la foto es el animal, y es gelatinoso]. Lo encontré en La Estrella de Antofagasta:

Descomunal y Extraño Monstruo Marino Apareció en Desolada Playa. Mide más de 20 metros y nadie sabe a qué especie pertenece.
Debido al avanzado estado de descomposición del animal, no se puede saber a ciencia cierta de qué especie se trataría. Además el olor en el sector es casi insoportable.
Faltan pocos minutos para las siete de la mañana y Luis Hernán nos espera en su casa. Nos hace una seña desde el vidrio y unos minutos después sale cargando seis arpones y varias bandejas para lo que será su jornada diaria como buzo profesional.
Antes de salir, pasa a buscar a sus socios, quienes tripulan el bote en el cual, un día atrás avistaron a un colosal animal en una intrincada ensenada ubicada a más de 50 kilómetros al noroeste de Antofagasta.
Partimos a las 7 en punto, tras una escala para combustible, nos avisan que tendremos otra parada antes de salir de la ciudad. Se trata de una ‘picá’, donde por una luca se puede comprar un tremendo churrasco palta (para comer al tiro) y churrasco queso (para cuando termine la jornada).
Seguimos el camino hacia Juan López, para luego perdernos por un accidentada huella que sigue hacia el norte, dando la vuelta por el gran Morro Moreno.
Después de recorrer un par de bifurcaciones, la camioneta de Luis Hernán, se mete en una pequeña vía, con varias curvas y contracurvas, llegando hasta el borde de un acantilado.
Ahí se baja nuestro guía con sus socios y nos indica el caletón donde está varado el animal.
A lo lejos, los jotes se preparan para un festín; estas aves repletan las lúgubres lomas de los cerros escarpados, que rodean estas desoladas playas.
Son seiscientos metros, desde el lugar donde dejamos el vehículo hasta donde estas lúgubres aves merodean por una presa, que llevan días atisbando desde el aire.
Nos acercamos corriendo, pero a unos 20 metros el fuerte olor a descomposición nos hace detenernos, al momento que Luis Hernán trepa por una de las escarpadas lomas indicándolos el extraño monstruo marino, que desde arriba pareciera no ser tan grande, como realmente lo es.
 
Monstruo

El animal es de dimensiones colosales, más de 20 metros de una masa galatinosa, que con el poder del mar, atravesaron por una ensenada que no supera los tres metros de ancho.
La cabeza yace sobre la playa de rocas y aparte del olor, la increíble masa de este extraño ser, sorprende hasta nuestro guía, un viejo y experimentado lobo de mar.
El pescador nos cuenta que vio a esta criatura desde la playa cuando volvía, de una jornada de buceo. El dato se lo había pasado otra tripulación que había pasado por el lugar.
Trataron de ingresar con el bote, pero no pudieron hacerlo, por lo que ignoraron a ciencia cierta, de qué animal se trataba, debido al avanzado estado de descomposición y la extraña forma física, el animal no fue identificado de manera preliminar.
Los pobladores de Juan López, dijeron haber visto un cachalote, que fue brutalmente herido por otro extraño animal, lo que provocó que esta colosal bestia quedara varada sobre la playa.
El hecho ocurrió hace un par de meses, pero la sensación de los pescadores era que ese ‘algo’ que había dañado al cachalote, de igual manera, tendría que haber salido tan dañado como el poderoso cetáceo.
Al final nos alejamos del lugar sin saber realmente, de qué se trata, pero impactados por el descomunal tamaño del animal, que comienza a ser devorado por las gaviotas, los jotes y otros animales, que se reúnen alrededor de este festín.
Los restos, que con el paso de las horas huelen cada vez peor, serán por unos días una fuente inagotable de comida para estas aves y un verdadero enigma para los pescadores.
[Mario Sánchez Pérez]
[msanchezp@estrellanorte.cl]
[19 de septiembre de 2008]
estrella del norte]